Curioso Encuentro

CURIOSIDAD CASUAL

"La curiosidad puede ser una sensación bastante extraña a veces. Las ganas por develar verdades no tan evidentes o la imperiosa necesidad por saciar deseos muy profundos, es incontrolable. Puedo decir también, que suele traerte algunas amargas. Otras... Simplemente son fascinantes. La mía, me llevó a ella"

Una mañana como cualquier otra, decidí dar un paseo matutino. No sé porque deseaba hacerlo. Solo tenía ese impulso incrustado en mi cabeza. pero Hacer algo diferente para variar. Me puse un par de zapatillas blancas, una camiseta azul, sin mangas y una pantaloneta del mismo color de mi confiable calzado.

Salí de mi casa alrededor de las 7:00 am. En el camino hice pre calentamiento de 10 minutos aproximadamente. No quería ninguna complicación en el camino. Luego de eso, comencé a trotar. Lo hice de manera regulada. Sin acelerar mucho el paso. Casi 15 minutos después, arribé a un hermoso parque rodeado de naturaleza. La zona tenia muchos senderos. Tanto para peatones, como para andar en bicicleta.

Mientras transitaba por uno de los senderos del parque, observaba toda la vegetación que me rodeaba. Estar acompañado de las aves y sus trinos. A era sencillamente increíble. Los tenues rayos solares, hacían de la mañana bastante agradable y perfecta.

Me percaté que no era la única persona en el lugar. Muy cerca de ahí, iba una chica trotando. Específicamente en uno de los tantos senderos que había en la zona. Ella Llevaba un buen ritmo. Pude ver a simple vista, que era bastante atlética. Seguramente, alguna deportista aficionada, según mi breve escaneo óptico. En ese momento, no le preste más atención. Preferí continuar con mi pequeña aventura. Después de un rato. Noté, que todos los caminos convergían en un solo punto, 5 metros más adelante. Por ende, estaría más cerca de aquella señorita. Por alguna e inexplicable razón, me dió cierto interés por verla. Poco a poco se aproximaba. Parecía tan concentrada. Resaltaba su cabello negro, peinado con dos coletas. Debía admitir, que se veía hermosa.

Dejé de lado mis pensamientos y traté de localizarla. Para mi sorpresa. Ya estaba delante de mí. Al parecer, me perdí en mi mente por unos segundos. Nuevamente captó mi atención. Pude notar como bajaba su velocidad poco a poco. Me dió la impresión que me esperaba, para correr juntos.

Cuando al fin logré alcanzarla. Me recibió con una agradable sonrisa. Muy radiante. A parte, pronunció unas palabras que me dejaron atónito. "Pensé que eras tímido y no te acercarías". Y no contenta con eso. Me dijo. Salgo todas las mañanas. Esa es mi rutina, desde hace 4 meses". Con esas palabras, ya tenía mi total interés sobre ella. Si su intención consistía en avivar mi expectación. Lo había conseguido sin ningún esfuerzo. Después de esa breve, pero sustanciosa declaración, conversamos por horas. Tan llamativa fue nuestra conversación, que dimos varias vueltas alrededor del parque. Desde ese instante, nos veíamos todas las mañanas a la misma hora y el mismo lugar. Se podía sentir un comodidad absoluta y mutua entre los dos. Por azares o capricho de la vida, nos enteramos que ya nos conocíamos. De hecho. Ese evento, había sucedido dos años atrás en un restaurante. Después de semejante revelación. Tuvimos suficientes razones para volvernos más íntimos. Tal vez a niveles que ni en mis más locos sueños pudiese imaginar.

Mi curiosidad me llevo hasta ella.

No siendo más, los dejo. Hoy tengo una velada maravillosa, con una mujer muy especial. Espero les pique el gusanito de la curiosidad.